Edvard Munch o el arte de diseccionar almas

De origen humilde y con una vida llena de carencias, Munch supo utilizar con maestría su increíble talento artístico para reflejar las emociones.

La muerte temprana de su madre, su hermana y un padre tremendamente religioso, junto a una pésima economía, forjó un complicado carácter en el joven artista.

Selvportrett, Edvard Munch, 1881-82. Munchmuseet, Oslo.

''No voy a pintar más interiores con hombres leyendo y mujeres tejiendo. Voy a pintar la vida de personas que respiran, sienten, sufren y aman.''

Edvard Munch.

Edvard Munch nació un 12 de diciembre de 1863 en Løten, un pequeño municipio situado en el interior de Noruega. Su padre, Christian Munch, era un médico militar que doblaba la edad de su mujer, Laura Catherine Bjølstad.

Edvard era el segundo de 5 hermanos: Johanne Sophie, Peter Andreas, Laura Catherine e Inger Marie.

Cuando Edvuard contaba con sólo un año de edad, en 1864, a su padre le nombraron médico oficial en la fortaleza de Akershus, así que se mudaron a Christiania (actual Oslo). Sería en 1868, tan sólo cuatro años después, cuando su madre moriría a causa de la tuberculosis, nueve años antes de que sucumbiese su hermana Johanne (su hermana favorita).

Akershus festning. Oslo.

Teniendo en cuenta el contexto del país en la época, no es de extrañar que la familia Munch estuviese pasando las penurias que Edvard describía (agravado por el mísero salario y el pietismo radical de su padre). Noruega, que venía saliendo de una serie de guerras constantes, en aquella época era una sociedad preindustrial, que subsistía con la pesca y agricultura. Además, por aquel entonces se pensaba que la tuberculosis era una enfermedad hereditaria, lo que no ayudaba a calmar la tensión en la familia. Tanto Munch como todos sus hermanos estaban convencidos de que correrían la suerte de su madre (que por desgracia sí pasó con Johanne).

Criado, al igual que sus hermanos, por su padre y su tía Karen, pasó gran tiempo de su infancia enfermo, lo cual hizo que le instruyeran en casa la mayor parte del tiempo. También aprovechaba los ratos libres para pintar, cosa que a su padre nunca le hizo gracia. Edvard nunca contó con el apoyo de su padre en todo su desarrollo artístico, pues, según él mismo decía, ''era una verguenza para la familia''. El carácter nervioso y ultrarreligioso de su padre, la mala salud de Edvard y las muertes que rodeaban a la familia, hizo que el artista llegase a decir: "Mi padre era temperamentalmente nervioso y obsesivamente religioso, hasta el punto de la psiconeurosis. De él heredé las semillas de la locura. Los ángeles del miedo, el dolor y la muerte estuvieron a mi lado desde el día en que nací". Éste tétrico ambiente fue el que llevó a Munch a crear las sombrías obras.

En 1879, Edvard se matriculó en la Høgskolen i Oslo para estudiar ingeniería, destacando en matemáticas, física o química. Lamentablemente debido a sus frecuentes enfermedades no consiguió acabar la carrera y fue cuando decidió entonces dejar definitivamente la universidad para dedicarse a ser pintor. Haciendo caso omiso de su enfurecido padre, que veía el arte como algo libertino, Munch se matriculó en 1881 en la Statens håndverks- og kunstindustriskole (actual Kunsthøgskolen i Oslo), creando sus primeros retratos.

Dos años más tarde, en 1883, tendría lugar, junto a otros jóvenes estudiantes, su primera exposición. De la misma, no exenta de críticas, sólo se conservan los bocetos y Desnudo de pie. Se dice que el resto de obras fueron confiscadas por su padre. En sus primeros años como pintor, Munch experimentó con todo tipo de técnicas y colores, influenciado tanto por impresionistas como Manet como por postimpresionistas como Gauguin o Van Gogh. Rue Lafayette o Inger på stranden son dos ejemplos del estilo postmodernista de Munch.

Ya Edvard dentro del círculo bohemio, que poco a poco haría que cayese en el alcohol y peleas, la ira de su padre se acrecentó por su amistad con el escritor nihilista Hans Jæger. Por su lado, Munch veía que la sociedad estaba cambiando: poco a poco la mujer se volvía más independiente y comenzaba una tímida revolución sexual. Ésto llevó al artista a cambiar su actitud respecto a las féminas debido a su propia inseguridad y descarado en lo referente a lo sexual (impensable años antes, dado que era tremendamente reservado).

En medio de ésta vorágine, descubrió que el impresionismo no lograba reflejar lo que él quería expresar, ya que era demasiado superficial. Munch necesitaba mostrar su estado emocional, y tras anotar en su ''diario del alma'' lo que sentía, surgió su primer cuadro en el que rompía con el impresionismo: Den syke jenta. En él, reflejaba a su hermana, que como recordarás murió cuando él era pequeño. La pintura recibió duras críticas tanto por parte de familia como de críticos, ya que ''no era moralmente aceptable''.

Boceto de desnudo de munch. Munchmuseet, Oslo.

En 1885 comenzó el primero de varios viajes a París, llegando a la Exposition universelle en la que expuso su cuadro Morgen en el pabellón noruego. Conoció el Louvre y se sumergió más en el mundo artístico, sintiendose especialmente interesado por las pinturas de Gauguin, además de participal en la Feria Mundial de Amberes.

A su vuelta a Noruega y tras todas las experiencias parisinas, Munch logró crear un estilo propio, logrando que los colores reflejasen emociones y no sólamente figuras físicas. Creó Pubertet y Den syke jenta causando un revuelo en la Oslo Høstutstilling en 1886. Sin embargo, en la exposición individual que hizo después, con 110 cuadros, fue ampliamente aclamado. En 1889 la exposición de muchas de sus obras en una exhibición individual le valió una beca para estudiar en París con el realista Léon-Joseph Florentin Bonnat.

En el año 1890 la influencia del postmodernismo tomó fuerza en sus obras, como se puede observar en Livets frise, el conjunto de pinturas que muestra a su madre o a su hermana Sophia. Munch quiso así dar un impulso a la expresión de su memoria personal.

Arv, Edvard Munch, 1897-1899, Munchmuseet, Oslo.

El caso Munch: el escándalo de una nueva tendencia

En 1892, Adelsteen Normann, como representante de la Berliner Künstlerbund, invitó a Edvard a exponer en la Architektenhaus. La exposición se llevaría a cabo el 12 de noviembre y contaría con 55 cuadros, que provocarían verdadero estupor.

Como ya es por todos conocido, las corrientes novedosas nunca han sido por todos aceptadas, sobre todo al principio. En una época en la que reinaba el realismo, la pintura que reflejaba el desnudo tanto físico como del alma, no se lograba entender más que por el público más joven y menos conservador. Curioso, teniendo en cuenta que años depués la misma ciudad sería uno de los mayores exponentes del expresionismo...

Livets dans, Edvard Munch, 1899-1900. Munchmuseet, Oslo.

“Lo que el noruego había logrado en términos de informe, de brutalidad de la pintura, crudeza y mezquindad de sentimiento eclipsa todos los pecados de los impresionistas franceses y escoceses.", llegaría a decir el publicista e historiador Adolf Rosenberg.

Ése mismo mes y como protesta, se cerró la exposición, quedando como el escándalo más grande hasta el momento y dando fruto al comienzo del arte moderno alemán.

Aunque desde 1892 a 1908 estuvo viviendo en Alemania, Munch solía viajar tanto a París como a Kristiania, participando en numerosas exposiciones y haciendo contactos con otros artistas. En 1893 crearía una obra icónica en la historia del arte: Skrik. En ella se puede observar claramente la angustia que sufría Munch, expresada con una intensidad increíble.

Skrik, Edvard Munch, 1893. Nasjonalmuseet, Oslo.

Pronto contaría con el apoyo de artistas noruegos, con los que colaboraría estrechamente como con Henrik Ibsen, para quien creó tanto los escenarios como el vestuario para la obra Peer Gynt en 1896. Ese mismo año comenzó a hacer grabados, siendo un innovador en el grabado en madera noruego.

Las herramientas de Munch para crear los grabados. Munchmuseet, Oslo.

Ése mismo año murió su padre, hecho que le dejó sumido en una profunda tristeza, llegando a decir: "Vivo con los muertos: mi madre, mi hermana, mi abuelo, mi padre... Suicídate y luego se acabó. ¿Por qué vivir?". Dado que Christian era el sustento de Edvard, el artista a partir de ese momento cayó en un estado de miseria, ya que en un momento dado su familia con recursos dejó de ayudarle. Su terrible suerte hizo que en 1902 su pareja Tulla Larsen lo abandonara por otro hombre, tras una fuerte pelea que acabó con tiros. Edvard acabó con la mano herida y partió el retrato que había hecho de ambos por la mitad.

Las dos mitades del Selvportrett med Tulla Larsen, Edvard Munch, 1905. Munchmuseet, Oslo.

Para ese entonces, ya estaba totalmente sumido en el alcohol, por lo que ante a una enfermedad nerviosa se internó en una clínica de Cophenague, saliendo totalmente restrablecido. Todavía en sus obras se puede apreciar la angustia y ansiedad que sufría, como se puede observar en Galopperende hest, cuadro en el que muestra un caballo huyendo a toda velocidad:

Galopperende hest, Edvuard Munch, 1910-1912. Munchmuseet, Oslo.

Gråtende akt, Edvard Munch, 1913-1914. Munchmuseet, Oslo.

En 1911 recibió el encargo por parte de Universitetet i Oslo de decorar una de sus aulas con un cuadro que para Edvard sería el primero en gran formato: Solen. En él representa la ciencia, siendo cada uno de los rayos del sol una diferente disciplina. La universidad estuvo a punto de tumbarle el encargo dada la polémica que se generaba con el estilo artístico del pintor, pero afortunadamente fue aceptada. Como se puede apreciar, sus últimos cuadros no son tan tétricos, e incluso algunos, como éste último, son incluso esperanzadores.

Solen, Edvard Munch, 1911. Munchmuseet, Oslo.

Blodfossen, Edvard Munch, 1915-1916. Munchmuseet, Oslo.

En 1908 volvió a Noruega, estableciéndose en Kristiania hasta su muerte el 23 de enero de 1944, tan solo un año antes de que la II Guerra mundial tocase a su fin. Fué enterrado en el Vår Frelsers gravlund, en el distrito de Gamle Aker de la capital noruega.

Al morir Munch el mundo del arte perdió a uno de sus grandes genios, que supo plasmar con pintura el sentir humano, la enfermedad, la angustia, el amor o la alegría. Un artista que sembró la semilla de una nueva revolución artística, estudiada hoy día en todo el mundo.

Tumba de Edvard Munch. Vår Frelsers gravlund, Oslo.

Puntos de interés: Akershus festning

59°54′23.78″ N , 10°44′10.24″

https://www.forsvarsbygg.no/no/festningene/finn-din-festning/akershus-festning/

Nasjonalmuseet Brynjulf Bulls plass 3, 0250 Oslo, Noruega +47 21 98 20 00 https://www.nasjonalmuseet.no/

Munchmuseet Edvard Munchs Plass 1, 0194 Oslo, Noruega +47 23 49 35 00 https://www.munchmuseet.no/

Universitetet i Oslo

Problemveien 7, 0315 Oslo, Noruega +47 22 85 50 50

https://www.uio.no/

Vår Frelsers gravlund

Akersbakken 32, 0172 Oslo, Noruega